La teoría de la modernización es una teoría social vinculada a cómo progresan las sociedades. Examina los factores internos de un país, asumiendo que, con cierta ayuda, los países más «tradicionales» pueden desarrollarse de la misma manera que los «países más desarrollados».

La teoría de la modernización tomó las ideas de Max Weber, sociólogo alemán, que examinaba el papel de la racionalidad y la irracionalidad en la transición de las sociedades de lo tradicional a lo moderno. Más tarde, el sociólogo de Harvard, Talcott Parsons, aportó su propia interpretación de la modernización. La teoría cobró importancia en las décadas de 1950 y 1960.

La teoría se centra en los países más ricos y desarrollados (o más modernos), y sugiere que un aumento de la tecnología hará que todas las naciones sean ricas, especialmente si las naciones pobres son capaces de seguir el camino de estos países más ricos. Una de las ideas generales es que los países más ricos son la solución a la pobreza.

Para entender esto, primero debemos ver qué son los países tradicionales y los desarrollados, y en qué se diferencian. Esto es subjetivo, por supuesto, pero existe algún tipo de clasificación oficial. La propia ONU dice:

Las denominaciones «desarrollado» y «en vías de desarrollo» tienen por objeto la conveniencia estadística y no expresan necesariamente un juicio sobre la etapa alcanzada por un determinado país o zona en el proceso de desarrollo.

¿Qué es un país tradicional?

Un país tradicional también se denomina país no desarrollado. Según las Naciones Unidas, estos países presentan los indicadores más bajos de desarrollo socioeconómico. También tienen las calificaciones más bajas del Índice de Desarrollo Humano a nivel mundial.

¿Qué es el Índice de Desarrollo Humano?

Es una escala creada por el economista paquistaní Mahbub ul Haq. El IDH, como se conoce, es un índice que mide la esperanza de vida, la educación y la renta per cápita. Los países puntúan más alto cuando la esperanza de vida o la duración de la vida es mayor, cuando los niveles de educación son más altos y cuando la renta nacional bruta per cápita es mayor.

Por tanto, los países tradicionales o subdesarrollados puntúan menos en el IDH. También deben cumplir tres criterios para ser clasificados oficialmente como países menos desarrollados. Estos son la pobreza (por ejemplo, que la renta nacional bruta per cápita sea inferior a 1.025 dólares), la debilidad de los recursos humanos, como la sanidad, la educación y la alfabetización, y la vulnerabilidad económica debida a diversas razones, como la inestabilidad agrícola y los altos niveles de desplazamiento por desastres naturales.

Algunos ejemplos de los países menos desarrollados, según las Naciones Unidas, son:

• Etiopía.
• Uganda.
• Liberia.
• Haití.
• Tuvalu.
• Bután.
• Camboya.

¿Qué es un país desarrollado?

Para explicar qué es la teoría de la modernización, hay que explicar qué es un país desarrollado. Los países desarrollados se encuentran en el extremo opuesto de la escala. Generalmente, tienen una alta calidad de vida, una economía desarrollada y una infraestructura tecnológica avanzada. Hay más criterios que deben cumplirse para que un país sea clasificado oficialmente como desarrollado. Estos son:

• Producto Interior Bruto (PIB).
• Renta per cápita (alta).
• Producto nacional bruto (PNB).
• Nivel de industrialización (alto).
• Nivel de vida general (bueno/excelente).
• Cantidad de infraestructuras generalizadas.

Sin embargo, difieren ligeramente según el índice o la clasificación que estés examinando en ese momento. En general, siguen un patrón similar, y en la mayoría de las listas aparecen los mismos países. Algunos de ellos son:

• Noruega.
• Irlanda.
• Suiza.
• Hong Kong.
• Islandia.
• Alemania.
• Suecia.
• Australia.

Para saber qué es la teoría de la modernización, hay que explicar cómo funciona. Cuando hablamos de la teoría de la modernización en relación con los países tradicionales y en desarrollo, significa dos cosas. Una es que la teoría intenta identificar qué variables sociales contribuyen al progreso social. En segundo lugar, trata de explicar el proceso de evolución social. Examina tanto el proceso de cambio como las respuestas a este cambio, observando la dinámica interna Y las estructuras sociales/culturales junto con la adaptación de las nuevas tecnologías.

Según Rostow, economista estadounidense, la modernización de un país sigue etapas lineales. Se dice que estas son:

1. La sociedad tradicional.
2. Condiciones previas al despegue.
3. Despegue.
4. Impulso a la madurez.
5. Edad de consumo masivo (por ejemplo, modernización).

Esto establece una progresión de crecimiento: los países comienzan con valores, creencias y actitudes simples o tradicionales. Gracias a los avances tecnológicos, los países empiezan a ser más modernos; a su vez, hacen crecer su economía y mejora la educación. También podemos examinar cada una de estas etapas con más detalle.

La sociedad tradicional

Aquí es donde hay una tecnología limitada, o ninguna en absoluto. La sociedad depende de lo que se conoce como «agricultura de subsistencia». Se describe como una forma de agricultura en la que casi todos los cultivos o el ganado que se crían se utilizan para mantener al agricultor y a su familia, dejando pocos excedentes, si es que los hay, para la venta o el comercio. Los pueblos agrícolas preindustriales de todo el mundo han practicado tradicionalmente la agricultura de subsistencia. Algunos de estos pueblos se trasladaban de un sitio a otro a medida que agotaban el suelo en cada lugar.

La capacidad de crecimiento económico es limitada y no existe una nación centralizada ni un sistema político real. Como inicio de esta escala, aquí es donde comienzan todas las sociedades o países.

Condiciones previas al despegue

Seguimos hablando de qué es la teoría de la modernización explicando su funcionamiento. Las condiciones previas al despegue es cuando la economía empieza a cambiar debido a una demanda externa de materias primas; la agricultura comercial se pone en marcha y empezamos a ver inversiones en infraestructuras para ayudar a ello, como sistemas de riego o canales. Con ello llega la primera ola de avances tecnológicos, que se generalizan con el tiempo.

Debido a esto, la estructura social o statu quo comienza a cambiar. Empezamos a ver la movilidad social individual, por ejemplo, la gente sube la escalera social y se convierte en una clase superior, tal vez. Esto coincide con el desarrollo de una identidad nacional, con intereses económicos compartidos.

Despegue

A continuación viene el despegue propiamente dicho. Es un poco como una bola de nieve que se acelera y crece; todo se generaliza, como la urbanización y la industrialización. La nación también empieza a hacer avances tecnológicos en torno a este punto.

Se produce un rápido cambio hacia la producción de «bienes» en lugar de producir lo suficiente para mantener a la comunidad. Se dice que la industria textil suele ser la primera en «despegar» (de ahí el nombre de esta etapa) cuando un país se está desarrollando.

La Revolución Industrial que comenzó en Gran Bretaña fue impulsada por una revolución tecnológica. Comenzó en la industria textil, donde los inventos de finales del siglo XVIII transformaron la fabricación de telas. La demanda de ropa en Gran Bretaña había aumentado enormemente como resultado del auge demográfico provocado por la revolución agrícola. Estos avances, a su vez, tuvieron un impacto en todo el mundo. Por ejemplo, el consumo de algodón aumentó drásticamente en Gran Bretaña. Este algodón procedía de las plantaciones del Sur de Estados Unidos, donde la producción de algodón se disparó de 1820 a 1860 en respuesta a la demanda de las fábricas textiles inglesas.

Impulso a la madurez

En este momento empezamos a ver una inversión a mucha mayor escala en infraestructura social. Esto significa la construcción de escuelas y universidades, hospitales y viviendas, etc. La infraestructura de transporte de la nación también se desarrolla muy rápidamente durante esta etapa. La industria se diversifica: las nuevas industrias encuentran su lugar mientras las existentes siguen expandiéndose. Además, el enfoque de la fabricación de un país pasará de estar impulsado por las inversiones (por ejemplo, la creación de bienes de capital) a centrarse en el consumo interno y los consumidores.

Edad del consumo masivo

Esta es la etapa final de la teoría de la modernización de Rostow. En este momento es normal ver un consumo masivo de bienes de consumo de alto valor, como coches, smartphones, etc. Los consumidores, también conocidos como ciudadanos, suelen tener una renta disponible que les permite gastar más allá de cubrir sus necesidades básicas. La sociedad en sí misma es ahora más urbana; por ejemplo, se ha dejado de vivir en entornos urbanos como las granjas; ahora la gente vive en ciudades o en los espacios intermedios conocidos como suburbios.

La base industrial domina ahora completamente la economía. El sector primario de cada nación (por ejemplo, lo que más producen y exportan) tiene el mayor peso o importancia para la sociedad y la economía.

La teoría de la modernización, se mire como se mire, sugiere que todos los países siguen y deben seguir este patrón.

Ahora que ya sabemos qué es la teoría de la modernización, veamos algunas críticas vertidas sobre ella.

Ninguna teoría está exenta de críticas, y la modernización no es una excepción. Ha sido ampliamente criticada por muchos, ya que aplica una estructura y un modo de vida globalmente centrados en Occidente. Se dice que desprecia la cultura indígena, llegando incluso a decir que debería destruirse, en realidad. Andre Gunder Frank e Immanuel Wallerstein son dos estudiosos que han señalado esto. Se ha dicho que toda sociedad es moderna porque sigue existiendo, por lo que los críticos dicen que la teoría de la modernización llama primitivas a las naciones no occidentales y, por tanto, inferiores.

Dado que el término modernización se ha utilizado indistintamente con otros términos académicos y sociológicos, como «desarrollo», «liberalización», etc., puede ser difícil determinar exactamente a qué se refieren las personas cuando lo utilizan por escrito o en una conversación, o incluso en la política, si no son explícitas. El término se ha vuelto impreciso y, por tanto, según muchos, inútil o simplemente erróneo.

Otra crítica sugiere que esta forma de pensar es demasiado binaria. Considera lo tradicional frente a lo moderno y, aunque Rostow presenta una escala, muchos han sugerido que no es útil clasificar a las naciones únicamente en estas dos casillas. Esto se debe a que hay muchos factores que influyen en el desarrollo de un país.